Proyecto pro-mascota protege al ambiente
Foto: cortesía de PAW.
MULEGÉ
¿Qué tiene que ver una clínica veterinaria con el ambiente? Esa fue una pregunta que me hice hace unos 15 años cuando cambié mi papel de asesora a un grupo ecologista juvenil local por el trabajo de voluntaria en una clínica casera de esterilización en este pequeño pueblo desértico en la costa de la Península de Baja California.
Trabajando con unos 20 voluntarios extranjeros en la Clínica Veterinaria PAW (por el nombre en inglés Patrons of Animal Welfare), no pasó mucho tiempo antes de ver que nuestro grupo definitivamente había asumido un asunto global a nivel local: mejorar la salud de las mascotas y contener su población.
Mascotas por el número
En el censo de 2016, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México (INEGI) informó que siete de cada 10 hogares tienen mascotas pero alrededor de 13.7 millones (o 70 por ciento) de estos 19.5 millones de gatos y perros viven en las calles. Se estima que el número de perros aumentó en un 20 por ciento desde 2010.
No hay más cupo: el espacio es limitado durante las campañas de esterilización. Haga clic para ampliar. (Foto: Debra Valov).
Alrededor de medio millón de animales son abandonados cada año. Según el INEGI, una de las principales razones es económica. Muchos también son abandonados a los pocos meses de la navidad, cuando la novedad de una nueva mascota regalada se desvanece y se impone la realidad de la responsabilidad diaria.
Cuando comencé a visitar Mulegé, en 1990 el pueblo ya tenía una población notable de perros callejeros. Era muy común que se abandonaran los perros en las playas, dejando a los turistas la opción a alimentarlos o verlos morir de hambre.
Los animales callejeros: el problema
Tanto los gatos como los perros pueden transmitir unas enfermedades y parásitos en sus heces, en la ropa de cama y a través del contacto físico con el pelaje, las membranas mucosas y el contacto sexual. Algunos de estos pueden afectar a los humanos.
La lista incluye: la sarna, las pulgas y garrapatas, la tiña (una infección por hongos), TVT (el tumor venéreo transmisible, de perro a perro), las lombrices intestinales (las uncinarias, alfileres, solitarias, de corazón) y las infecciones bacterianas y los virus (el parvovirus, moquillo, leptospirosis y panleucopenia felina).
Una gata mayor recibe tratamiento para una infección. Haga clic para ampliar. (Foto: Debra Valov).
No se sabía con seguridad si todos los perros en las calles del pueblo en los años 90 tenían dueños, pero había perros en cada esquina, acostados en la calle, tomando el sol en el invierno, o metidos debajo de los automóviles para escapar del sol abrasador el resto del año. Luchaban entre sí o atacaban a una hembra en celo, volcaban tambos de basura y ensuciaban el entorno. Los animales muertos en la carretera, que pasa por varias colonias del pueblo, eran algo cotidiano.
La negligencia y el abandono absoluto de los gatos también son problemas grandes tanto en Mulegé como en la península, donde su papel histórico no es como mascota sino para el control de plagas.
"Los gatos son independientes… pueden cuidarse solos…estarán bien solos". Todos son conceptos erróneos comunes en todo el mundo sobre los gatos domesticados que, si se dejan solos, su reproducción sin control y su salud no atendida, pueden causar estragos en la fauna local y crear un ambiente poco saludable para todos, a medida que se dispara rápidamente su población.
En dos años, una sola hembra fértil y su descendencia femenina fértil podrían producir hasta 200 individuos.
Los informes de los medios de comunicación a menudo culpan a los gatos domésticos por el declive de las especies nativas en todo el mundo. Si bien es difícil evaluar el número exacto de aves, reptiles y mamíferos que los gatos matan cada año, las estimaciones muestran que los gatos callajeros (o broncos) representan aproximadamente el 75 por ciento de los 1-4 mil millones de aves y el 90 por ciento de los 6-22 mil millones de mamíferos matados cada año en América del Norte [1].
Promover el cuidado responsable de las mascotas desde pequeña es una parte vital de nuestro trabajo. Haga clic para ampliar. (Foto: Debra Valov).
De las víctimas, se cree que entre el 75 y 100 por ciento son especies nativas. No parecen estar disponibles datos específicos para México.
En un ecosistema desértico, único y delicadamente equilibrado como el que existe en la mayor parte de la Península de Baja California, donde los alimentos y agua son limitados, los mamíferos, anfibios y reptiles nativos no se encuentran en cantidades abundantes. Significa que la pérdida de un pequeño número de los individuos reproductores podría tener un impacto considerable en la salud de cualquier especie local.
Las serpientes no venenosas, los lagartos, ratones de campo, ratones canguro, conejos, topos, ardillas de tierra y una variedad de especies de aves se encuentran entre las víctimas comunes de los gatos en nuestra área. Y no todas las especies dañadas o matadas por los gatos son comidas por ellos.
Se desconocen la población felina en Mulegé. Lo que está claro es que la población pasa por ciclos, al igual que el número esterilizado cada año.
Preparan el próximo paciente para la esterilización. Haga clic para ampliar. (Foto: Debra Valov).
Un gran obstáculo para controlar la población de gatos es que muchos de nuestros clientes no pueden tocarlos, y mucho menos manejar a sus gatos o atraparlos para transportarlos a la clínica. De vez en cuando es necesario que los voluntarios de la clínica salgan al campo para ayudar a los residentes a atrapar los gatos callajeros en sus colonias.
La situación actual
Tenemos un programa activo de los veterinarios visitantes durante cinco meses del año. Los veterinarios de los Estados Unidos, Canadá y más allá vienen para ofrecer sus servicios gratuitos durante una campaña de esterilización a cambio del hospedaje y las vacaciones. También contamos con el gran apoyo de la comunidad extranjera que hace posible nuestro trabajo.
La educación es una parte importante de la misión de la clínica, especialmente sobre los beneficios de esterilizar y vacunar a las mascotas. El contacto diario personal con los dueños de mascotas y otros miembros de la comunidad ha sido efectivo para difundir el mensaje. Este año finalmente hemos tenido éxito en el reclutamiento de varios voluntarios locales.
Autora en su rol directivo, un trabajo de malabarismo diario que a menudo es como contener una camada de gatitos. Haga clic para ampliar. (Foto: Cortesía de PAW).
Hemos visto un cambio en las actitudes hacia la esterilización desde 2006, cuando los hombres estaban dispuestos a esterilizar a sus perras, pero ni siquiera considerarían castrar a los machos. Si bien esa actitud no se ha desvanecido por completo, hemos visto un cambio gradual a lo largo de los años y ahora regularmente castramos acerca de un perro macho por cada dos hembras esterilizadas.
Diez años de datos muestran que más de 10 mil 400 animales han recibido algún tipo de tratamiento veterinario, con casi 3 mil 200 esterilizaciones; 1 mil 990 de estos eran hembras. También se administraron alrededor de 8 mil vacunas contra la rabia a los perros y gatos.
En los últimos cinco años de los 13 que he estado involucrada con PAW, hemos visto los resultados más tangibles. Los clientes y otras personas que conocen bien el pueblo nos comentan que hay muchos menos perros en las calles y los que ven tienden a tener collares y verse saludables.
Una de nuestras mayores preocupaciones en avanzar o al menos mantener los logros en el control de la población actual de mascotas es la realidad de que un desastre natural nos espera a la vuelta. Hemos tenido la suerte de habernos recuperado por completo tres veces después de que se dañó la clínica original y se perdió el equipo por causa de las crecidas del río. Pero la herida es más profunda de lo que pasó a nuestras instalaciones: interrumpe el tejido social y los residentes damnificados luchan por recuperarse de la pérdida d sus hogares y ingresos; las mascotas caen en el último lugar en la lista de prioridades.
Desde 2009, hemos crecido y prosperado y la población de animales parece haberse estabilizado o disminuido. Pero ahora, ante la pandemia de Covid-19, que requirió la cancelación de nuestra campaña final de esterilización para la primavera de 2020, nos preocupa que los factores económicos que afectan a nuestros vecinos puedan borrar gran parte o todas las ganancias que hemos logrado como clínica y como comunidad, y que el pueblo experimentará un aumento de gatitos y cachorros callejeros o abandonados, y una disminución relacionada en la salud general de la comunidad.
Como voluntarios, nos recuerdan cada día los residentes locales y los visitantes que la clínica brinda un servicio importante y necesario a nuestra comunidad adoptada. Me gusta pensar que también hacemos nuestra pequeña parte para transformar nuestro planeta en un lugar mejor, un gato o un perro a la vez.
Patrons of Animal Welfare (PAW) Animal Clinic
1 Loss, S., Will, T. & Marra, P. (2013). The impact of free-ranging domestic cats on wildlife of the United States. Nat Commun 4, 1396. [disponible a: https://www.nature.com/articles/NCOMMS2380]